Un Principio Bíblico es una verdad fundamental, clara y extensa que se encuentra en la Biblia, que además de darnos una visión global de la teología, nos da una base para concluir sobre asuntos específicos.
Por otro lado, esta visión global que constituye un principio bíblico fundamental, surge de la reflexión sobre un conjunto determinado de verdades específicas o “doctrinas”.
Podemos decir entonces que la relación entre los principios fundamentales y las doctrinas o conclusiones sobre verdades específicas es una relación “dinámica”. Porque hemos descubierto una serie de verdades de la Biblia es que podemos establecer algunos principios pero a su vez el tener los principios fundamentales nos da capacidad para realizar conclusiones doctrinales en forma más eficiente.
Habría que aclarar además que en cuanto a la identidad denominacional, los principios juegan un papel muy importante. Podríamos diferir en cuanto a algunas doctrinas (Escatología: el milenio, el rapto etc., Eclesiología: comunión abierta, cerrada o semiabierta o semicerrada etc.), pero no podemos diferir en cuanto a los principios y seguir siendo bautistas. Esta es entonces la razón por la que debemos estudiar nuestros principios.
Les llamamos PRINCIPIOS BÍBLICOS QUE CREEMOS LOS BAUTISTAS, porque es lo que son, son principios bíblicos, los bautistas no los inventamos sólo los hemos creído a través de la historia por haberlos descubierto en el Nuevo Testamento.
- EL PRINCIPIO CRISTOLOGICO: El Señorío De Cristo.
- EL PRINCIPIO BÍBLICO: La autoridad del Nuevo Testamento.
- EL PRINCIPIO ECLESIASTICO: Una membresía Regenerada.
- EL PRINCIPIO SOCIOLÓGICO: Un gobierno u orden democrático.
- EL PRINCIPIO ESPIRITUAL: La libertad religiosa.
- EL PRINCIPIO POLÍTICO: La separación entre la Iglesia y el Estado.
- EL PRINCIPIO EVANGELÍSTICO: El Evangelismo Personal y la Obra Misionera.